La caridad es paciente, es servicial; la caridad no es envidiosa, no es jactanciosa, no se engríe; es decorosa; no busca su interés; no se irrita; no toma en cuenta el mal; no se alegra de la injusticia; se alegra con la verdad. Todo lo excusa. Todo lo cree. Todo lo espera. Todo lo soporta. La caridad no acaba nunca. Ahora subsisten la fe, la esperanza y la caridad, estas tres. Pero la mayor de todas ellas es la caridad.

jueves, 11 de febrero de 2010

Tocando el cielo









Os copio la descripción que hace Oscar de El Alto y de La Paz:

"En relación a El Alto, es cuando menos peculiar, por que como te imaginarias una ciudad de un millón d habitantes "a medio construir", donde prácticamente nada esta acabado y casi todo se queda a medias (casa a ladrillo visto, calles medio empedradas, carreteras semiasfaltadas, avenidas levantadas...).



En cierta manera da la sensación de estar en Castilla, pues el marrón de tierra y adobes lo inunda casi todo. El toque de color lo dan los gigantes que emergen sobre el cercano horizonte. No muy lejos de aquí se elevan los Andes, a mas de 6000 m. d altura y con sus cumbres siempre nevadas. Las ocasiones en q las nubes los dejan al descubierto, cuando menos te dejan boquiabierto, que al lado de ellos, nuestra cordillera, parece de juguete.


El sol es esquivo, y a pesar de ser ahora verano, el fresco o casi mejor el frio es habitual (con una o dos tormentas diarias); pero los días en que las nubes se alejan y Lorenzo puede brillar con plenitud, a mediodía no hay quien pare bajo el; se nota q estamos altos, por que pega a gusto (no es de extrañar que la gente este "negra").



Una curiosidad que tiene el altiplano es la capital, La Paz. Es un sitio que sorprende... Imagina una meseta pelada a 4000 m.. Ahora imagina que esa planicie de repente se hunde, se hunde de forma abrupta, formando un cráter de cerca d 1000 m. de profundidad, cráter cuyas paredes son vertiginosos abismos q cortan a pico. Si te asomas a ese valle en forma de cráter, veras como en su fondo se amolda una ciudad de casi un millón de habitantes, de donde emergen rascacielos y las casas mas humildes, se abigarran en empericotadas de manera inverosímil, alrededor de las enpinadas laderas. En fin, que la imagen sobrecoge, mas aun cuando se da la circunstancia de que en 10 minutos por carretera, pasas de 4100 m. a unos 3500."




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