Laicos para el Desarrollo

Esta semana pasada celebramos dos cumpleaños: el de Chuli y el de Óscar. El lunes, el de Chuli, lo pasamos comiendo paella en casa de las salesianas (Hna. Ana y Marianela), torta de chocolate y fresas, visita a un supermercado y cine nocturno en la ciudad.

El jueves junto a la comunidad, tuvimos otra torta de chocolate para Óscar y ya el viernes, su cumple, nos fuimos a cenar juntos (los voluntarios) a la ciudad… ¡comida semi-basura y helado!

La comunidad parroquial va creciendo: a nosotros cinco, los chicos vocacionales, el padrecito, el Giovanni, las hermanas, Ronald y su familia, hay que unir y presentar a José Adolfo. Es un nuevo voluntario, de Ocasa (creo que está mal escrito), es de Ciudad Real y viene a El Alto por tres años. Vive en la parroquia y ye la bomba.

Es como una familia muy variopinta, porque la verdad que vaya mezcla de personas más dispares. De momento reina la felicidad y no ha surgido ningún conflicto serio, así que nos llevamos fenomenal.

Se echa de menos a las familias que nos han acogido este mes y medio, pero es que… ¡¡YA VIVIMOS JUNTOS!! El viernes nos mudamos Fernando, Carlos y yo, el sábado Yoli y el domingo Óscar. Nos hemos pasado el fin de semana pasado limpiando, agarrando catarrazos y encontrando la mayor porquería pocas veces vista. Al final hemos conseguido convertir la casa de voluntarios en el “hogar” de los voluntarios. Según entras por la puerta lo primero que ves es una bandera, un reloj y un calendario de Asturias. ¡Que se note de dónde somos y que no nos olvidamos!

Tenemos un salón-comedor que todavía hay que arreglar un poco, una nevera ya medio llena, tres habitaciones (en una dormimos Yoli y yo, en otra Fernando y Carlos, y en la nueva Óscar y el trastero), un baño muy apañao, cocina muy acogedora si estamos los cinco dentro y un patio en el cual trabajaremos todo el año. ¡Convertiremos un váter viejo en una maravillosa maceta art-decó! Jajaja. Y ya si nos lo permiten, tenemos pensado hacer unos cuantos grafitis en las paredes.

La casa está en el barrio PRIMERO DE MAYO y estamos a una cuadra (manzanas de casas) de la parroquia. ¡En el centrito! Con una calle “comercial” paralela, otra un poco más allá y entre dos buenas ferias de fin de semana

La última noticia sobre la casa, es que Carlos ha comprado las mascotas que nos resguardarán de los tropecientos ladrones que hay por aquí: DOS POLLOS. Se llaman Broster y Chicharrón, que son dos formas de preparar el pollo aquí para comer. ¡Para que vayan asimilando su futuro!

Como actividades de cuaresma, en la parroquia (más concreto en la capilla de Señor de Mayo) están montando con los jóvenes un musical para Semana Santa: JESUCRISTO SUPER-STAR. Fernando y Carlos ya están manos a la obra con ensayos y pruebas de vestuarios. De aquí a Hollywood.

También esta semana pasada (el martes) hemos tenido una cena de agradecimiento a las familias acogedoras, que con mucho gusto han degustado nuestras tortillas de patatas, huevos rellenos y frixuelos. Triunfamos y ahora nos quieren todavía más.

En cuanto al panorama nacional, para que os hagáis una idea, es muy interesante. Poco a poco vamos entendiendo su política (muy absurda en la mayoría de las veces). Esta semana pasada hemos tenido paro de transporte, por la nueva ley que dice no se puede beber alcohol para conducir, durante dos días: piquetes y chicotazos (cinturonazos) a los esquiroles que trabajaban. Son bastante violentos, la verdad.

Aunque lo que de verdad está ahora en boca de todos son los terremotos de los hermanos chilenos, que para colmo han irrumpido en la toma de posesión del nuevo presidente. ¿Serán señales? Aún así no hay que ponerse nervioso, porque aquí son bastante habituales estas cosas. Lo bueno, es que comienza a entrar el invierno y eso hará que deje de llover y que en Bolivia no tengamos más inundaciones.

Sin más, hasta la próxima queridos lectores y por favor, ESCRIBID. Que no os cuesta nada y a nosotros nos carga las pilas. ok???